No puedo pensar, sólo siento el martilleo constante en mi cabeza, bueno, martilleo no, más bien una presión, cómo si un algo estuviera intentando abrirse paso a través de mi cráneo…
La vista me falla, me siento mareada y el estómago empieza a revolverse.
Hoy es un día de pocas palabras, dado que no puedo pensar. Es una noche para irme ya a la cama a pesar de tener mucho que estudiar, una noche para dormir y sentirme culpable mañana.
Hoy me permito no hacer nada, principalmente porque no veo que sea capaz.
Sinceramente, no creo que haya ser vivo que pueda llevar con dignidad esta migraña…